Mónica
Soy Mónica, a veces me pierdo en los detalles y otras veces en el paisaje completo. Voy por la vida tratando de dejar un mundo un poco mejor que cuando nos encontramos. Explorando y descubriendo. Recordando que está bien no tenerlo todo planeado y cambiar de rumbo cuando así lo sientas, está bien volar alto siempre recordando que tus pies son tus raíces. Y que mientras más honesto seas contigo, es cuando tu vida la empiezas a sentir más llena de vida, con su serenidad y sus tormentas.
Mi camino ha tenido giros que no imaginé que tendría y los sigue teniendo. Nací en Durango, a los 18 años me fui a estudiar a Monterrey, N.L. y ya no volví.
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Soy actuaria de profesión y aunque me gusten los números en 6to semestre me sentí por primera vez perdida en la vida (hasta ahora son tres veces, pero esa es otra historia). Me di cuenta que no me gustaba mi carrera, pero la terminé. Después inicié una maestría que tampoco me encantaba, pero me dejé convencer porque sabía que podía ayudarme a largo plazo (y no me arrepiento). La disfruté, aprendí mucho y gracias a eso estoy estoy trabajando en un corporativo nacional.
En los últimos años me he mudado a tres ciudades diferentes y el triple de veces me he cambiado de casa, pero en todo este tiempo entendí lo importante que es dejar de huir y hacer un trabajo interno, sentarte contigo mismo para saber hacia dónde quieres dirigirte, porque a veces en el nombre de fluir, empiezas a andar hacia caminos que no son tuyos.
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Me di cuenta que cocinar y escribir son de mis placeres más grandes. Empecé a conocer y a enamorarme de herramientas de autoconocimiento y cómo aplicarlas en mi vida como Human Design y la Astrocartografía y a partir de ahí entendí muchas cosas y sigo aprendiendo otras.
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Por salud, decisión, amor y respeto comencé a cambiar toda mi vida: mi alimentación se volvió mayormente a base de plantas, la comida, productos y ropa que compro son otros, lo que consumo en redes sociales, las personas de las que me rodeo. Sigo en este camino, errando y aprendiendo, pero ahora entiendo lo importante que es ser consciente de tu consumo y cómo te nutres, en todo.
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Creo que elegir de manera consciente cómo nutres tu cuerpo, tu mente y tu espíritu puede transformar tu vida. Y aquí te comparto lo que me ha funcionando y lo que sigo aprendiendo y aplicando en mis días.
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Qué gusto tenerte aquí. Gracias por acompañarme.
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Encontrémonos en las letras, con pausas y espacios. Recetas exclusivas, pensamientos y situaciones que tal vez se parezcan a tu pasado o a tu presente y podamos aprender siendo espejos o portales.
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Una carta honesta, de mí para ti.
